Pues no creáis que escribir este post me hace mucha gracia pero he encontrado una serie de razones que han hecho que me pareciera interesante publicarlo.
No me hace gracia escribir el post pues lo ha motivado, fundamentalmente, la situación horrible por la que estamos pasando y que a mí me tiene aterrada. Como aterrada estoy -un poquito de humor aunque no todo el mundo lo aprecia en estas circunstancias- ante la perspectiva de tener que pasar las próximas semanas con mi hijos adolescentes, repletos de hormonas malolientes aun en estado de reposo, en casa.
Y no me hace gracia tampoco porque os voy a hablar de manualidades que es un tema que me aburre soberanamente. Así que, por favor, valorad el esfuerzo y seguid leyendo…