Cristina, ¿Qué me pongo?

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Hay cosas para las que la vida no te prepara. Y tu madre tampoco.

Una sabe qué ponerse si le invitan a un bautizo, una comunión o una boda. Incluso sabría qué ponerse, dado que lee el Hola cada vez que va a la peluquería, para asistir a un cocktail o una cena de gala. Pero, para ir a una fiesta organizada por Agatha Ruiz de la Prada, os lo aseguro, una no está preparada.

Por eso, cuando el martes por la mañana abrí el armario con el fin de decidir que me pondría para ir esa misma tarde a la inauguración de la exposición que El Corte Inglés ha preparado con motivo de los 20 años de colaboración con la diseñadora, me entró pánico.

En más de una ocasión he oído decir a la homenajeada que no le gusta el color negro, que es triste y aburrido. Pues eso, mi ropa de invierno abarca toda la escala de grises, marrones oscuros, «navy blue» y negro… mucho negro.

No me quedaba más remedio, por mucho que a mí me horroriza, que salir de compras.

A las dos de la tarde cerré el despacho y me fui al único centro comercial que hay en mi localidad de residencia. Me encaminé, sin pensarlo dos veces, a Cortefiel que es donde yo me equipo habitualmente. Enseguida me di cuenta de que no era el sitio adecuado. No creo yo que haya mucho feeling, estéticamente hablando, entre uno y otra.

Pasé al plan B: Sfera. Ahí la falta de sintonía se produce entre su tallaje y mi cuerpo. Lo que para ellos es una 44 para mí es una 38. Agobiada, angustiada y enfadada comprendí que tendría que recurrir al Plan C: no ir a la fiesta.

Plegué velas y había emprendido el camino de vuelta cuando, de repente, en un escaparate me topé con dos jerséis monísimos de diseño retro -propios de la mismísima Jackie Kenedy- pero teñidos de los colores Agatha por excelencia, el uno naranja muy naranja y el otro fucsia muy fucsia.

Entré en la tienda, me probé diversas tallas y, cuando asumí cual era la mía -que no os voy a decir- llegó el terrible dilema: ¿qué color elegir?

Enseguida caí en la cuenta de que la respuesta estaba en mis manos o, mejor dicho, en mi  Whiteberry: whatsappearía a mi amiga Cristina que es mi asesora para temas agathianos.

Como no os voy a dar más datos sobre la identidad de mi amiga Cristina -evitando así cualquier tipo de demanda por intromisión en la intimidad- y dado que lo de pensar se me resiste últimamente, os transcribo el Whatsapp:

– Cris querida, aparte de no ir de negro, ¿hay algún dress code para esta tarde? Lo de dress code lo he leído en Telva.

– Jajajaja, no, hombre…. colores y a poder ser FUCSIA ARP y/o VERDE CORTE INGLÉS.

– Vale, me voy a comprar un jersey ad hoc pero dudo entre el fucsia y el naranja!! jaja

– Pues si te los vas a comprar en ARP para ECI los dos valen.

– No!!! jaja, Yo barato, barato!!! Pero vamos, que después del jersey que voy a llevar salgo contratada!!!

– Jajajaja

– Ahora me voy a «los chinos» a por el collar más cantoso.

– Jajajajaja. Que no es de disfraces el evento!!

– Pues yo, poniéndome de colorines, como si lo fuera. Jaja.

(Entonces le envío esta foto)

– Mi duda existencial!!!

– Ideales los 2 pero mejor el de la izquierda. El más fucsia.

– Listo, no me va a conocer ni papá Compritas (que es como algunas «amigas» llaman al SQVEMCYEEPDMH)

– Jajajajajaja

– Ahora tengo dudas con los calcetines.

(Y mando esta foto)

– Jajajajajajaja. Estoy deseando verte!! Esto lo tienes que contar en tu blog! O lo cuento yo, jajajajaja! Los de rayas.

– Jajajaja Pues la pulsera es lo más.

– Los que no tienen monos ni nubes. -Yo ya he avanzado hasta la pulsera pero ella se ha quedado en los calcetines. Son las cosas del Whatsapp-.

– Pero vamos, que ya me pueden invitar a más eventos para amortizar la inversión!!

– Jajajajaja

– Eso o me ponen de azafata.

– Jajajajaja, cuenta todo esto esa noche en tu blog, porfa, que va a ser genial!!!

– O vete tú a saber si no se confunden los del Corte cuando llegue y me ponen a repartir cocktails.

– Jajajajaja, sí, porque los cocktails son del color de tus calcetines y/o jersey. A esa hora estoy lista pal evento.

– Ya me veo con la bandeja.

– Que majas sois!

– Quién?

– Este último no era para ti.

– Ah!! Jajaja Osea que yo no soy maja

– Era pa mis compis que me vienen a buscar.

(Aquí hago yo un inciso para decir que éste es un claro ejemplo de que las mujeres somos capaces de hacer dos cosas, o más, a la vez. ¿Alguna conoce a algún hombre que «whatsappee» con dos o tres personas a la vez?) Continúo:

– Q majas!! jaja Luego nos vemos pero, ojo, que no hay calcetines!!!

– Tú? Majísima!! Por? Te has decidido por unas catiuscas de colores?

– He agotado presupuesto!

– Jajajajajajajaja

– Y mi sentido del ridículo, que es enorme, me lo impide!!!

– Cuánto tenías de presupuesto? Jajajajajajajajajajajajajaja

– Estoy pensando que no tengo bolso. Ir con la mochila del cole de mi hija, un poco desproporcionado, no?

– Jajajajajajaja

– Jajajajajajajaja Te dejo que no llego a por los niños.

– Jajajajajaja, hasta luego.

– Jajaja adiós :))

Y llegó la fiesta y fue muy divertida. Estuvo regada por cocktails verdes y rosas (estos últimos muy cargaditos), había mucha gente -unos muy conocidos y otros no tanto-, música estupenda y, gracias a Dios, un aire acondicionado fabuloso que hizo que no me achicharrara con mi jersey fucsia que, por cierto, suelta tanto pelo que me tuve que llevar un cepillo en el coche para adecentarme antes de entrar.

Os dejo un par de «collages» para que os hagáis una idea del ambiente de la fiesta y de las cosas que podéis ver si vais a la exposición de AGATHA RUIZ DE LA PRADA que está en la primera planta de EL CORTE INGLÉS de Castellana.

 Podéis pinchar en las imágenes para ampliar y así poder ver la super-pulsera-mega-fashion que me compré para estar a la altura de las circustancias. Esta tarde/noche haremos el sorteo de la pulsera que ÜLA PLATA nos ha regalado para celebrar los 9000 de Facebook. Si todavía no habéis participado, lo podéis hacer AQUÍ

Y os dejo dos avisos:

FELIZ FIN DE SEMANA