Mares de cosas y Mares de Lunares

mares de lunares

Pues ya se terminó el puente. Después de analizar, lápiz en mano, lo que nos ha supuesto quedarnos estos días en casa, hemos tomado una importantísima decisión: el próximo puente nos vamos a casa de los abuelos. Entre cines, exposiciones, hamburguesas, gasolinas, etc. el «puentecito» casi me sale más caro que un mes en la playa. «¡Suegri, prepara las croquetas que nos vamos a verte!» mares de lunares

A pesar de ello han sido unos días de grandes experiencias y, en consecuencia, de crecimiento personal. No solo he jugado mi primer «tie-break» -que he perdido como el resto de los partidos que he disputado estos días- sino que, por primera vez -y a mis taitantos años-, he ido al cine a ver una película yo sola. ¡Y no me ha pasado nada! Aprovechando que los niños y su padre querían ir a ver Los Vengadores -a lo que yo me negué rotundamente- decidí entrar en otra sala a ver The Pelayos. No es que tuviera un interés especial en esta película pero es que las alternativas no eran muy apetecibles. Si sois más afortunadas que yo y no necesitáis esperar diez años para ir al cine a ver una «peli de mayores», os recomiendo que la veáis: entretenida y divertida. Eso sí, mejor ir acompañadas porque -me pasó a mí- yendo sola parece que da más vergüenza reirse «a pierna suelta» y no se disfruta tanto. mares de lunares

Y, además de enriquecerme como persona gracias a estas nuevas experiencias vitales, este fin de semana largo también me ha servido para enriquecer mi pobre intelecto. He aprendido muchas cosas nuevas sobre la figura de Leonardo Da Vincci en la exposición sobre el universal «todólogo» organizada por la Fundación Canal y que os recomendaría encarecidamente sino fuera porque ya no tiene mucho sentido pues se clausuró ayer.

Pero para que no os quedéis con ganas de exposiciones os recomiendo la que se inaugura mañana en el Museo Naval de Madrid a beneficio de la Asociación Pablo Ugarte. En ella se expondrán y se pondrán a la venta unas 60 obras. Los beneficios obtenidos se destinarán íntegramente a la lucha contra el cáncer infantil. La exposición se puede visitar a lo largo de todo el fin se semana. Ni que decir tiene que merece la pena ir tanto por ver las obras cedidas como por visitar el Museo Naval que es una preciosidad. mares de lunares

Y, para terminar, os tengo que contar que este puente también he aprendido lo que significa la palabra «burlete». Hace un par de días recibí un correo de Eugenia en el que me hablaba de su tienda. Eché un vistazo y enseguida me di cuenta de que mi amiga Carmen ya me había hablado de ella pero que su correo, como tantos otros, lo puse en la carpeta «Revisar cuando tenga un ratito libre». mares de lunares

He mirado la web de Eugenia, de abajo a arriba y de arriba a abajo, varias veces pues me encanta. Tiene varios productos y todos ideales y personalizables: albornoces, toallas, cestos, papeleras, vasos para los lápices, marcos de fotos…

…y burletes. Por más que he intentado encontrar fotos de los burletes en cuestión, no los he encontrado así que he tenido que recurrir a la RAE  para saber lo que es un burlete:

«BURLETE: Dicese de la tira de vendo o tela, con relleno de estopa o algodón, que se pone al canto de las hojas de puertas, balcones o ventanas para que, al cerrarse, queden cubiertos los intersticios y no pueda entrar por ellos el aire en las habitaciones». mares de lunares

Pues si necesitáis un burlete u os encapricháis, como me ha pasado a mí, de un albornoz de mangas con volantes o de una papelera para el cuarto de los niños, o de un conjunto de toallas para el baño o la piscina, aquí os dejo el enlace:

MARES DE LUNARES

Feliz resto de semana. mares de lunares