La Cenicienta y muchos de los cuentos de Walt Disney -casi todos- nos cuentan unas tragedias terribles. Confieso que, hasta que no vi El Rey León -sigo llorando cada vez que pienso en el pobre Simba sintiéndose culpable por la muerte de su padre-, no me di cuenta del tema. Cenicienta
Pero ahora que soy consciente de ello, lo pienso y no doy crédito: La Cenicienta y Blancanieves huérfanas de madre y sus padres, ¡en qué estarían pensando!, van y se casan con las más malas del reino; la Bella Durmiente alejada de sus padres durante toda su infancia; los Dálmatas secuestrados y a punto de ser asesinados por una tía malísima que quería hacerse un abrigo con ellos -vivir esa experiencia a una edad tan temprana es un trauma del que no creo que todavía se hayan recuperado-; traumatizado también de por vida, debido a un defecto físico sin importancia, el pequeño Dumbo; lo de Bambi no tiene nombre ¿era necesaria tanta crueldad?; la Sirenita sufriendo por un amor, en principio, inalcanzable; la Dama y el Vagabundo, una terrible historia de exclusión social; del Patito Feo prefiero no hablar porque se me encoge el corazón; ¿qué me decís de Pinocho?… ¡Pero si hasta al pobre Papá Increible no le dejan ganarse la vida como a él realmente le gustaría! Cenicienta
Pues, sobre todo esto he estado pensando este fin de semana en el que la vida de la pobre Cenicienta ha estado muy presente en mi cabeza hasta el punto de sentirme total y plenamente identificada con ella. Cenicienta
Y es que, como dicen que ya llega el frío, he dedicado el fin de semana a sacar la ropa de invierno y guardar la de verano: cajas por aquí, bolsas por allá, niños probaros esto, aprovecha para limpiar los armarios, empieza a poner lavadoras, guarda este pantalón, este otro para tirar pues está viejísimo, cose este botón, ordena esto así, coloca lo otro aquí…
¡Por lo menos Cenicienta, después del trabajo, se fue de fiesta! Yo ni eso. Cenicienta
Pues esta introducción era la excusa para traeros mi collage de hoy en el que he preparado una selección de monísimos «looks de Cenicienta» para nuestras niñas, bueno, para las vuestras pues la mía ya no tiene edad… aunque la tuvo y tuvo su vestido con mandil -de Trapitos-.
A mucha gente no le gustan este tipo de vestidos o le gustan únicamente para ceremonias. A mí me hacen mucha gracia, no lo puedo negar y, como os decía, mi hija tuvo el suyo. Esto os lo cuento por tener una excusa para enseñaros esta foto:
Y, ahora sí, aquí tenéis una selección de vestidos con delantal para las niñas. Ya me diréis si os gustan.
Los enlaces a las tiendas mencionadas son:
El vestido de A Gatas lo he encontrado en VELVET
Maria ya te he escrito algunas veces pero ahora me interesa de verdad he visto lo de la cenicienta y los vestidos de pikiliki me encantan etro en el blogs pero no se ninguna maera de cotactar con la chica que los hace dame ua solucion gracias guapa
María,
mis niñas han llevado el de Querubines en azul para damitas de una boda en el mes de Septiembre y la verdad es que el resultado me encantó.
La verdad es que los compré en otra tienda y no sabía la marca y cual es mi sorpresa cuando al leer tu post de hoy me los he encontrado.
Como siempre gracias por toda la información que nos das.
Nuria
Mis hijas tuvieron unos vestidos con mandil precisamente de «A-gatas». ¡Qué guapas iban! Mi hija mayor con 10 años ya no tiene edad… ni cuerpo. Ya he empezado a comprarle ropa en Mango, Zara de «mayores», vaqueros en Stradivarius… ¡Ya no me gusta comprarle ropa! y encima ¡protestando todo el día! ¡De momento me recreo con Trasluz!
María, a mí no sólo me gusta sino que me encantan!!! Qué pena no tener una niña para ponérselos. Por cierto, para rizar el rizo esto traje se llaman «Dindel» que es la palabra alemana original. Ah! y no te preocupes por los traumas infantiles. Hace unas semanas salió un estudio en el que se recomendaba que los niños recuperaran las pelis de Disnery no la estética actual de los dibujos actuales en las que parece que el malo siempre gana.
hola maria…ja,ja,ja me enacntana tus entradas,eres toda una inspiracion…aprovecho ademas para decirte que ya hemos puesto a andar la tienda online a traves de la web y aunque ha sido un parto durillo y largo ,al final ,ya esta aqui y espero que os guste!bicos
La verdad es que no los tengo muy vistos por aquí, pero el de tu niña y los de pikiliki y tatín me gustan, son monísimos. Tus niños, como siempre muy guapos.
besitos
A mí sí me gustan. Reconozco que son un poco especiales y entiendo que no gusten pero son bonitos y están muy graciosas con ellos.
Besos.